Sabemos que muchos alimentos economicamente no son accesibles para toda la población. Por eso, es fundamental conocer opciones accesibles que brinden los nutrientes necesarios sin comprometer el presupuesto familiar.

Proteínas de fácil acceso:

• Huevos: Son una excelente fuente de proteínas y vitaminas del grupo B, fundamentales para mantener la energía y la masa muscular. Son asequibles y fáciles de preparar.
• Legumbres (frijoles, lentejas, garbanzos): Son ricas en proteínas vegetales, fibra y minerales como el hierro. Además, son económicas y pueden combinarse con otros alimentos.
• Pollo o pescado: En comparación con otras carnes, el pollo y el pescado son opciones más económicas y fáciles de digerir, proporcionando proteínas de alta calidad.

2. Carbohidratos complejos y fibra:

• Avena: Es una fuente económica de fibra, que ayuda a mejorar la digestión y evitar el estreñimiento, un problema común en personas postradas.
• Arroz integral: Aporta energía de larga duración y fibra, lo que mejora la salud intestinal.
• Tortillas de maíz: Son accesibles y una buena fuente de energía. Pueden acompañar las comidas sin elevar en exceso los costos.

3. Frutas y verduras accesibles:

• Plátano: Rico en potasio y fácil de digerir, es ideal para mantener el equilibrio de electrolitos y prevenir calambres.
• Zanahorias y calabacitas: Son fáciles de cocinar y económicas, además de ser ricas en vitaminas A y C, que favorecen la salud visual y la cicatrización.
• Manzanas: Fáciles de encontrar y suaves para el estómago, aportan fibra y antioxidantes que ayudan a mejorar la digestión.

4. Grasas saludables:

• Aceite de oliva: A pesar de ser un poco más caro, su consumo moderado aporta grasas saludables que mejoran la salud cardiovascular.
• Aguacate: Fuente rica en grasas saludables y vitaminas E y C, que ayudan a mantener la piel hidratada y a proteger el sistema inmunológico.